El Acuerdo de París, de 2015, supuso un hito histórico en la transición hacia un mundo climáticamente neutro. Las redes eléctricas son fundamentales para permitir esta transición energética, puesto que desempeñan un papel clave para la electrificación de la demanda de energía y para la integración renovable del sistema eléctrico.
Eurelectric, una serie de operadores de sistemas de distribución, asociaciones de empresas de servicios públicos y E.DSO, han desarrollado un estudio que cuantifica la inversión necesaria en redes eléctricas para conseguir la transición energética en Europa. Además, se recogen recomendaciones en el ámbito político y normativo.
El Acuerdo de París supuso en 2015 el impulso necesario para que la UE haya liderado la puesta en marcha de ambiciosas políticas y objetivos de descarbonización. Además, como parte del Pacto Verde Europeo, la Comisión Europea propuso en septiembre de 2020 diferentes objetivos. Entre ellos, aumentar el objetivo de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) para 2030. Al menos en un 55% por encima del objetivo de 1990.
Las redes eléctricas desempeñan un papel clave en la consecución de estos objetivos: la electrificación reduce las emisiones GEI porque es neutra en emisiones de carbono y tiene una mayor eficiencia para las aplicaciones más relevantes. La producción energética de nuevos vectores, como el hidrógeno verde o la tecnología power-to-X, permitirá reducir las emisiones donde el uso directo de la electricidad puede no ser el adecuado.
Beneficios e inversión
Alcanzar los objetivos de descarbonización de la UE requerirá esfuerzos significativos. Estos esfuerzos serán en la electrificación, en la generación de energía neutra en emisiones y en la eficiencia energética.
Las redes de distribución de energía son un elemento fundamental en la transición energética europea porque son la base para la electrificación y la expansión de la capacidad, actúan como puntos de conexión para las plantas de energías renovables y ayudan a la flexibilidad y la gestión de la demanda. Según este estudio, las redes eléctricas de distribución europeas requerirán de una elevada inversión. Se calcula de entre 375-425 mil millones de euros en el periodo 2020-2030 en la UE y Reino Unido.
Grandes beneficios a la sociedad
Las inversiones en redes de distribución de energía ofrecen grandes beneficios a la sociedad en los siguientes ámbitos:
- Sostenibilidad: permiten el despliegue de la movilidad eléctrica y las energías renovables.
- Competitividad: facilitan la disminución del precio de la electricidad y las reducciones de las importaciones de combustible, debido a una mayor electrificación con energías renovables.
- Economía: fomentan la actividad de fabricación y los empleos de calidad.
- Progreso hacia la centralización del cliente: nuevos servicios.
Retos a los que se enfrentan los Operadores de Sistemas de Distribución
Los Operadores de Sistemas de Distribución deben afrontar una serie de desafíos en tres áreas clave:
- Planificación y ejecución de las inversiones: la supervisión de la red para anticipar las necesidades de inversión y optimizar la planificación.
- Automatización: modernizar la red y mejorar su estabilidad y resistencia, así como mejorar la gestión y la seguridad de los datos.
- La integración de renovables y recursos energéticos distribuidos: esto incluye el control de los desequilibrios de la red, debido a la mayor penetración de los sistemas de energía renovable variable, y permitir la participación del lado de la demanda.
Recomendaciones políticas y regulatorias
Es necesario elaborar una serie de políticas y procedimientos para ayudar a que las redes de distribución de energía permitan una transición energética eficiente. Entre ellas se incluyen:
- Marcos de planificación nacional flexibles, que se puedan adaptar y que estén alineados con la transición energética, eliminando los límites de inversión regulada.
- Facilitar el acceso de los Operadores de Sistemas de Distribución a los fondos de la UE e integrar a las redes de distribución eléctrica en los planes de recuperación pos-COVID de la UE.
- Involucrar adecuadamente a las comunidades locales desplegando actividades de capacitación para los trabajadores locales.
- Simplificar los procedimientos de autorización y concesión de permisos para mitigar los obstáculos a los proyectos estratégicos.
- Definir estructuras tarifarias eficientes para optimizar las inversiones a largo plazo y facilitar la sostenibilidad económica del sistema eléctrico a nivel de país.
- Dotar a los organismos de apoyo a la exportación de un nuevo papel mediante la elaboración de marcos normativos en el ámbito de la UE.
- Posibilitar modelos de remuneración e incentivos rentables y con visión de futuro para permitir la transformación de la red y la transición energética.
- Desarrollar la flexibilidad mediante la definición de funciones, infraestructuras, indicios económicos y procedimientos de intercambio de información.
Vehículos cesta para la instalación de la red de distribución eléctrica
Los trabajos en líneas eléctricas que se realizan en altura, deben cumplir con una serie de condiciones de acceso y de trabajo para minimizar al máximo cualquier eventualidad o accidente.
La evolución de los sistemas de telecomunicaciones hace que cada vez existan más colectivos. Éstos trabajan directa o indirectamente expuestos a los riesgos que supone la utilización, mantenimiento e instalaciones de energía eléctrica. Y sobre todo en el caso de realizarlo a grandes alturas.
El desconocimiento del riesgo que supone trabajar en la instalación y mantenimiento de las líneas eléctricas hace que muchos profesionales del sector no sean realmente conscientes de las consecuencias de esta labor.
En primer lugar, hay que definir los equipos idóneos para cada acción de instalación, mantenimiento o reparación. Teniendo en cuenta la altura, la estabilidad del terreno, el acceso y las condiciones climáticas.
El segundo lugar, es disponer de los recursos humanos con la formación en el trabajo en altura necesario a realizar, pero también en el uso y manejo de vehículos con plataforma para el acceso a alturas, según la norma UNE 58923:2020.
Finalmente, el vehículo cesta que se utilice es importante en el desarrollo del trabajo y aún más importante el uso y precauciones que se hagan en su uso.
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